El estilo romántico en diseño de interiores se caracteriza por su elegancia y su capacidad para hacer que los ambientes luzcan más acogedores sin perder sofisticación, además, es una opción popular para aquellos que buscan crear espacios que evoquen una sensación de romanticismo y encanto. A continuación, se describen las características, orígenes y ejemplos del estilo romántico en diseño interior.
Características del estilo romántico:
Detalles delicados: El estilo romántico se caracteriza por la presencia de detalles delicados como encajes, bordados, volantes y flores. Estos detalles se utilizan para crear un ambiente cálido y acogedor.
Colores suaves y sutiles: Los colores que se utilizan en el estilo romántico son tonos suaves como el beige y el blanco roto, o pasteles como el rosa pálido, celeste y lavanda. Estos colores transmiten una sensación de calma y tranquilidad, creando un ambiente romántico y sereno.
Materiales y texturas suaves y naturales: El uso de materiales naturales es una parte esencial del estilo romántico. Madera, mimbre, lino y seda son ejemplos de materiales comúnmente utilizados. Texturas, como las telas de terciopelo, algodón, seda y los tejidos de punto, también se encuentran en este estilo.
Iluminación suave: En este estilo, la iluminación suave y difusa es fundamental. Lámparas de mesa con pantallas de tela, candelabros con luces tenues y velas proporcionan una iluminación romántica, cálida y acogedora.
Muebles y accesorios vintage: A menudo, en este estilo, se incorporan muebles y accesorios vintage. Piezas antiguas, como una cómoda restaurada, una mesa de café con patas curvadas o una lámpara de araña ornamentada, pueden ayudar a crear una sensación de nostalgia y romance en el espacio. El estilo romántico incorpora también una variedad de estampados florales con detalles bordados para agregar interés visual y táctil
Orígenes del estilo romántico:
El estilo romántico encuentra sus raíces en Francia con el movimiento artístico y literario del siglo XIX conocido como Romanticismo. Este movimiento surgió como una reacción contra el racionalismo y el orden neoclásico que predominaban en ese momento. Los artistas románticos buscaban expresar la emoción, la belleza, la individualidad y la naturaleza.
El Romanticismo influyó en todos
los aspectos de la cultura, incluido el diseño de interiores. Durante esta
época, se valoraba la opulencia y la ornamentación, y se crearon espacios.
Grandes salones con muebles lujosos, tapices decorativos y detalles elaborados
eran características comunes de los interiores románticos de la época.
Ejemplos en el Diseño de Interiores:
Palacio de Versalles: Este icónico palacio en Francia es un ejemplo clásico del estilo romántico. Con su arquitectura intrincada, detalles ornamentados y muebles elegantes, el Palacio de Versalles es un símbolo de la opulencia y el romance.
Café Angelina en París: Ubicado en la capital francesa, el Café Angelina es un lugar emblemático con una decoración romántica. Con sus sillas de terciopelo, cortinas de encaje y delicados platos de postre, el café recuerda una atmósfera romántica y encantadora.
En resumen, el estilo romántico
en el diseño de interiores se caracteriza por colores suaves, materiales
naturales, detalles ornamentados, muebles y accesorios vintage, y una
iluminación suave. Sus orígenes se remontan al movimiento artístico y literario
del Romanticismo en el siglo XIX. Con ejemplos como el Palacio de Versalles o el
Café Angelina. Si estás interesado en incorporar este u otros estilos,
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Imagen tomada de Arcux